Los nuevos requisitos de resbaladicidad de suelos en el Código Técnico de la Edificación (CTE) permitirán la utilización de piedras pulidas en espacios interiores públicos y la utilización sin necesidad de ensayo, de piedras con acabado flameado o abujardado en exteriores.
El pasado mes de marzo el Ministerio de Fomento publicó un nuevo documento, designado DA DB-SUA / 3 (Resbaladicidad de suelos), que complementa al documento del Código Técnico de la Edificación DB SUA (Seguridad de Utilización y Accesibilidad).
Puede descargarse libremente en:
Introduce varias novedades que afectan de forma muy favorable a la utilización de la piedra en edificación:
– Se dan instrucciones para la obtención del valor de la resbaladicidad en seco.
– Se establecen los valores mínimos de resbaladicidad en seco para la asignación de clase, que será aplicable a zonas interiores secas:
CLASE 1, Rd>40
CLASE 2, Rd>65
– Se consideran suelos seguros y por tanto sin necesidad de realizar ensayos, entre otros a los suelos de piedra natural con acabado flameado y abujardado.
Antes de la aparición de este documento, la clase 1 de resbaladicidad se obtenía con un valor Rd>15 con el ensayo en húmedo. Las piedras pulidas, apomazadas o envejecidas no suelen alcanzar este valor, excepto cuando son bastante porosas, por lo que no podían cumplir el requisito exigido para los suelos interiores secos de edificios públicos. Sin embargo, con el ensayo de resbaladicidad en seco, los suelos pulidos obtienen normalmente valores de Rd>50, por lo que se les puede asignar la clase 1. Por tanto, la principal implicación de este nuevo documento es que nuevamente podrán instalarse suelos pulidos en todo tipo edificios, como venía haciéndose desde la antigüedad hasta 2006, año de entrada en vigor del CTE.
No se establece un catálogo de zonas interiores secas, por lo que únicamente se pueden deducir de la descripción de las zonas interiores húmedas que aparece en el CTE DB-SUA: “las entradas a los edificios desde el espacio exterior, terrazas cubiertas, vestuarios, baños, aseos, cocinas, etc.”. Por tanto debe entenderse que en edificios como cafeterías, residencias de ancianos, supermercados o aeropuertos, por citar unos cuantos ejemplos, podrán volver a usarse suelos pulidos.
Esta posibilidad afecta favorablemente, más que a otros materiales a la piedra natural, debido a que cuando se fabrica con acabados rugosos, pierde casi toda la intensidad de su color, y por tanto su belleza.